Agua Zarca
Por Remigio Godoy
ESTA BOCA ES MÍA
Vota a aquel que prometa menos. Será el que menos te decepcione.
Bernard M. Baruch (1870-1965)
Financiero y asesor presidencial estadounidense.
Estimado lector, reciba un cordial saludo y mi agradecimiento por favorecerme con su amable atención, a esta irreverente e inculta columna que cada semana atenta contra el buen gusto y las buenas costumbres.
COMO NO HACERTE POPULAR PARTE UNO Hoy, pretendo compartir un tema, que estoy seguro, no me acarreara muchas simpatías y hará que mi santa madre reciba infinidad de saludos, y es que intento referirme a la necesidad de los impuestos.
Si, como lo escucho, bueno en realidad como lo leyó, la necesidad de los impuestos. Y antes de que inicie la lluvia de jitomatazos, permítame entrar en materia y sin más vueltas entro al tema.
En primer lugar, la Constitución Mexicana, establece entre las obligaciones de los mexicanos, en su artículo 31, fracción IV la de: "Contribuir para los gastos públicos, así de la Federación, como del Distrito Federal o del Estado y Municipio en que residan, de la manera proporcional y equitativa que dispongan las leyes." Así de plano, es obligación de todos los mexicanos eso de contribuir a los gastos públicos, y ¿Cómo hacemos eso?, pues mediante nuestros impuestos.
En el país existen una enorme diversidad de impuestos, unos más justos o equitativos que otros, existe un impuesto al consumo, el IVA o impuesto al valor agregado; otro que grava las ganancias o renta que reciben las personas o empresas, el ISR o impuesto sobre la renta; otro que grava la posesión de bienes muebles o inmuebles, como el ISAN o impuesto sobre autos nuevos y el impuesto a la tenencia de vehículos en el primer caso y el Impuesto Predial que grava la propiedad de bienes raíces.
Sin embargo, desde tiempos inmemoriales, ha existido una natural renuencia de los individuos de pagar impuestos, su propio nombre lo dice todo, los sentimos como impuestos, como que nos son impuestos por otro, además a diferencia de otros cobros que realiza en Estado en el impuesto el ciudadano no recibe de manera inmediata ningún contraprestación o servicio, no, por el contrario paga y ya, el beneficio de su pago no se ve reflejado de manera directa, sino que el Estado se lo regresa en otras formas.
Recordemos lo que menciona la Biblia, el reproche que los "puros" fariseos le hacían a Jesucristo, era el que se reunía con prostitutas y "publicanos" los publicanos eran precisamente los recaudadores de impuestos y por ello, junto con las mujeres que ejercían el comercio sexual, formaban el estrato social más bajo y el más indigno a la vez.
¿Son necesarios los impuestos? Si, definitivamente, para cualquier ente de gobierno, llámese Municipal, Estatal o Federal, los impuestos son como la sangre al cuerpo humano, los entes públicos los requieren para sobrevivir, pues difícilmente puede tener ingresos por otros conceptos, o por lo menos ingresos tan cuantiosos como los que se obtienen por esa vía.
En nuestro país, los impuestos representan una parte importante de los ingresos públicos del país, a nivel federal, ya que representan cerca del treinta por ciento de los mismos, seguidos en orden de importancia por los ingresos por concepto de derechos por la venta de hidrocarburos, es decir, los ingresos de tipo petrolero.
Sin embargo, para nadie es un secreto que el sistema tributario en nuestro país es, per se, uno de los mas inequitativos y difíciles del mundo, está plagado de dificultades que dificultan el cumplimiento de las obligaciones de los individuos que pagamos impuestos a la par de que por un vicio de origen cuenta con una serie de incentivos y beneficios perversos para favorecer a determinados contribuyentes contra otros permitiendo que aquellos que debería pagar más en razón de obtener mayores ingresos, puedan eludir su responsabilidad dejando en los pequeños contribuyentes la mayor parte del peso de mantener la Hacienda Pública.
De ahí que no nos sea grato el pago de los impuestos, de cualquier impuesto y si a esto le agregamos que existe un desencanto del contribuyente ante una clase política mediocre que no demuestra precisamente un uso eficiente del dinero público, las ganas de pagar impuestos se nos quitan con mayor facilidad.
Por ello algunos políticos populistas nos deslumbran con promesas de eliminar impuestos, y de inmediato, los ciudadanos consideran que eso es la mejor opción, aunque la verdad es que los ingresos que dejen de percibirse por concepto de impuestos deberán de salir de algún lado, ya que las supuestas reducciones de tributos difícilmente vienen acompañadas de medidas de austeridad en rubros como los servicios personales, como las nominas, que cada día crecen más en cantidad de personas y nivel de salarios o en gastos de operación como inversión en infraestructura.
Es decir, ya de por si las administraciones públicas recaudan mal, pues como dice el dicho, entre los que pagamos impuestos, ni están todos los que son, ni son todos los que están, sino que además los pocos impuestos que se recaudan se gastan con criterios tan mediocres que dan ganas de llorar, pero no lloro, porque soy bien macho.
¿Que pasa entonces cuando no se quieren aumentar los impuestos y se quieren aumentar los ingresos? ¿De dónde salen dichos recursos? Principalmente de dos vías, de prender la maquinita del dinero y de contratar deuda. Ambas medidas, sabemos los mexicanos por cuenta propia son malísimas, y acarrean a corto o largo plazo consecuencias más negativas que las de haber pensado en una mayor tributación. Ejemplos de ello existen bastantes, México es un ejemplo viviente, pero también está por ejemplo Grecia, o España o los mismos Estados Unidos, países que han hecho del crédito su modo de vida y que con ello han financiado su gasto corriente, dando a sus ciudadanos subsidios que tarde que temprano alguien tendrá que pagar y créame, no serán los gobiernos, sino los propios ciudadanos. Vemos como estos países que le acabo de mencionar, Grecia y España, además de Irlanda que se les unió apenas el día Miércoles, enfrentan serios problemas para hacer frente a sus deudas soberanas, es decir a la deuda que como país tienen ya con bancos privados, ya con organismo multilaterales, y que hoy tiene al bordo de una nueva crisis económica mundial a todo el sistema financiero.
Y es que es lógico el asunto, las finanzas de un país no son diferentes a las de un individuo, no se puede gastar lo que no se tiene, ni se puede vivir eternamente de crédito, sin buscar otras fuentes de financiamiento, pues se llegara al punto en el que el pago del servicio de la deuda, que no son otra cosa que los intereses, sea tal que absorba todos nuestros ingresos. Por ello ofenden actitudes como las asumidas por el Gobernador del Estado "Fray Tequila" González Márquez, que pretendía endeudar al Estado con la graciosa cantidad de ¡$ 5,100 Millones de pesos!, ándale con eso te retiras, ¿no? Petición de deuda que al parecer será rechazada al estar sustentada mas en las ocurrencias del etílico mandatario que en un verdadero plan de infraestructura y modernización del Gobierno Estatal, o el crédito que recibió el organismo operador del sistema de agua potable de la zona metropolitana, el SI-APA que teniendo como objetivo el ser invertido en infraestructura para dotar de agua potable a aquellas colonias que carecían de tan vital liquido, sirvió para pagar la nomina repleta de amigos y recomendados y para que unos vivos sintieran lo que era jugar a la Bolsa de Valores y perder el dinero ajeno, además de financiar una que otra campaña política, y alguna casita del pueblo, no se crea.
Pero no crea que los Municipios cantan mal las rancheras, no si las cantan hasta con falsete, pues Guadalajara y Zapopan contrataron deuda por la cantidad de $ 1,000 Millones de pesos cada uno, según ellos para construir necesaria infraestructura vial. O la deuda que fue autorizada al municipio de Sayula, para comprar un terreno con la finalidad de construir una central de autobuses, un núcleo de feria y un tianguis, tareas solo la ultima, a la que realmente tiene obligación el municipio, las otras dos no.
Creo que Usted conoce la avenida Lázaro Cárdenas en la ciudad de Guadalajara, esta importante vía que prácticamente atraviesa de un costado a otro la ciudad fue construida por el municipio de Guadalajara, con ingresos propios, sin pedirle dinero al Gobierno del estado ni al Federal, y sin un peso de deuda, pero claro eso sucedió cuando a los perros los amarraban con longaniza, los políticos eran honestos y no existían las enormes nominas repletas de compromisos políticos.
La cuestión es que, le decía, los políticos son tan amantes de prometernos eliminar impuesto y nosotros tan creídos de ellos, que terminamos pagando costos superiores o nuevos impuestos más injustos. Le pongo por ejemplo el impuesto a la tenencia de vehículos, un impuesto que cuando se creó, se nos platico que sería por un ratito, nada más mientras pasaban las olimpiadas, pero que en realidad llego para quedarse. Luego en la campaña del 2006 el candidato del empleo, de sepulturero, nos prometió que lo iba a eliminar y hace poco lo cumplió, dejo de ser un impuesto federal, y se dejo en libertad a los estados la posibilidad de crearlo como impuesto estatal, ya que este impuesto constituye una parte importante de los ingresos de los estados y de los municipios y la verdad sin el mismo verán las de Caín las haciendas municipales y podrían vivir, año con año, una crisis el doble de profunda a la que se vivió en las finanzas públicas en el 2009, en donde dejaron de percibir estados y municipios por concepto de participaciones la jugosa cantidad de Nueve Mil Millones de pesos.
Eliminar este impuesto y no establecer uno de igual tipo pero estatal equivaldrá a quitar de golpe el 84% del número de policías con que cuentan en este momento los estados y el Distrito Federal, o en su caso, cancelar cada año más del 30% de la obra pública que realizan las entidades federativas con sus recursos propios; como equivale también a suprimir en más del 70% los servicios de agua potable, o dejar de pagar más del 100% de los intereses de su deuda, o bien dejar de pagar el 16.08% del saldo total de esta deuda.
Los recursos que se dejarían de recaudar a partir del 2012 por no implementar el impuesto de Tenencia Vehicular, representarían dejar de construir en un año más de 1,700 kilómetros de carreteras, hacer 2,100 escuelas públicas, o construir 70 hospitales para atención de un promedio de 370 mil derechohabientes; o bien suprimir 6.7 veces el número de agentes de vialidad y tránsito de las entidades federativas.
Esto es así debido a que la recaudación de tenencia representa prácticamente el 20% de los ingresos propios de las entidades federativas, el 51% de los impuestos locales y el 66% del valor de su impuesto sobre nómina, como también el 45% del incremento de sus obligaciones financieras para el año 2009.
Cabe señalar que esta pérdida podría significar que varios estados no cuenten con recursos propios para realizar inversión y obra pública directa, o peor aún, que la mayoría se vean obligados a elevar significativamente su nivel de endeudamiento, dado que la pérdida se presentará cada año, multiplicando entonces sus efectos.
Ahora bien seamos realistas, una encuesta publicada en el periódico "El Puente" ubica los ingresos Familiares en la Región Sur de Jalisco, muy por debajo de los Seis Mil Pesos mensuales y con esa cantidad no vamos a poder comprarnos un coche nuevo en el mediano plazo y quitando este impuesto lo único que vamos a conseguir es subsidiar a aquellos individuos que tienen más ingresos el que si puedan comprase coches nuevos y de mayor precio, abriendo un poco más la ya de por si enorme brecha de desigualdad social en el país.
Entonces ¿Qué podemos hacer? ¿Pagamos o no pagamos impuestos? Definitivamente es mejor pagar impuestos, pero los gobiernos tienen una tarea titánica en el sentido de motivarnos a dicho pago, y considero existen cuatro puntos importantes que atacar antes de que veamos muchedumbres de contribuyentes haciendo fila en Hacienda para pagar sus tributos, y le muestro:
" El sistema tributario mexicano es muy complejo, por lo que la reforma fiscal integral deberá contemplar una inyección de simplicidad. Se deberá además considerar la eliminación de varios tratamientos especiales a diversos sectores de la economía, pues ya hemos visto que algunos mexicanos pagan muchos impuestos, mientras que muchos pagan muy poco o no pagan nada.
" La evasión fiscal es muy alta.
" La gente tiene que saber que su dinero se gasta bien y de manera eficiente. Es decir, el incentivo más importante para fomentar el pago de impuestos es gastar bien. Los contribuyentes deben poder apreciar que sus impuestos sirven para mejorar el nivel de vida de todos los mexicanos. Conviene aquí retomar dos conceptos esenciales: el de la transparencia, que implica claridad en la asignación y uso de los recursos públicos; y el de la rendición de cuentas, que sugiere que para pagar a gusto los impuestos, debe abatirse la impunidad. Si un funcionario desvía, roba, o aplica mal los recursos, debe ser claramente identificable por los sectores sociales afectados, y debe ser imputable.
" El comercio informal sí le cuesta al conjunto de los ciudadanos mexicanos, independientemente de que es un problema serio de legalidad y equidad en la aplicación de la ley de manera homogénea a todos los sectores de la población.
" Una reducción del IVA beneficiaría a los sectores más ricos de la población.
Hasta aquí la primera parte, la próxima, cuáles podrían ser los mecanismos para aumentar los ingresos municipales.
ZurrapasZona de Minas Antipersonal: El camino que va a Usmajac, está cada vez en peor estado de conservación y los muchos baches que existen en toda la vía ponen en riesgo a los conductores y peatones que utilizan esa vía, ahí baches de todos los tamaños y para todos los gustos y si a eso sumamos el cuetochinero, pues ya sabrá el riesgo que corren los que cruzan por esos lares, pero ya sabemos, Usmajac, no aparece en el mapa político del Intendente Municipal.
El Criollo Justiciero: Por azares del destino o por artes del demonio el caso de mi "tío" Alonso Godoy fue a parar en el Congreso del Estado a la comisión de responsabilidad que integra nuestro diputado criollo, el cual promete al respetable quemar en leña verde a este mal servidor público. Si como no.
Casa desafinada: ¿Cuando pensara el gobierno municipal concluir el jardín Celso Vizcaíno? Digo ya quedo establecido que no podemos hacerle el capricho al niño Mauricio de tumbar el edificio por tener valor estético y artístico y ser una de las pocas muestras de una arquitectura pos-revolucionaria, y lo declaro la Secretaria de Cultura.
Sigo recibiendo sus comentarios en el correo electrónico
remigio.godoy.sayula@gmail.com un saludo y nos leemos la próxima semana.
